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Fallado el concurso Ciudad Colonial de Santo Domingo, República Dominicana

2015.06.01 REP. DOMINICANA PANEL3 ESCALADO

Queremos dar la enhorabuena al equipo MONEO BROCK – AUC – ÚRCULO – ARQUEZ por haber sido seleccionados para desarrollar tan importante intervención para la Ciudad de Santo Domingo.

Estamos muy satisfechos del trabajo que presentamos y que hicimos con el máximo respeto hacia este lugar tan emblemático del patrimonio dominicano y con absoluto rigor y cumplimiento en cuanto a los presupuestos que hay disponibles para su realización.

Os hacemos partícipes de los paneles presentado al concurso y que se falló el paso mes de marzo.

Resumen de nuestra propuesta

Del análisis que realizamos de las Ruinas de San Francisco, estamos completamente convencidos de que no se debía plantear una actuación constructiva intensiva sobre las estructuras ruinosas de las dos iglesias en torno al claustro, y que era necesario buscar las oportunidades de intervención de manera selectiva. Respecto a la rehabilitación del convento se proponía la reutilización y completamiento de los restos conventuales, conservando los elementos de mayor valor como la portada. Esto permitiría configurar y recuperar la escala del patio en su condición de elemento básico de la tipología claustral, utilizando estructuras arquitectónicas neutras, que no entraran en competencia con los restos y fragmentos originales. Estas dependencias obtenidas a través del aprovechamiento riguroso y respetuoso de las cimentaciones existentes podría albergar el acceso principal a las ruinas, el centro de interpretación y los servicios complementarios que habría que ubicar en esta parte, con las limitaciones de volumen que imponga la arquitectura preexistente.

En el resto del ámbito resultaba esencial potencial el carácter de espacio libre público, compatible con su uso cultural, y que debía funcionar como elemento vertebrador, así como estructurante urbanístico en la manzana. Así, se introducen unos elementos estructurantes que configuran de forma precisa los espacios libres de edificación que permiten identificar las partes distintas, percibir e interpretar las ruinas arqueológicas y separar los ámbitos que pueden resultar tipológicamente incompatibles. Por ello proponíamos que la edificación que alberga el programa de usos solicitado debía configurar un gran espacio libre acotado, un sutil ámbito arqueológico que abarca espacios y tránsitos diferentes, y que permite relacionar el parque arqueológico con el claustro y las ruinas más importantes.

La edificación es capaz también de configurar y estructurar el espacio urbano en su perímetro, capaz de recuperar la escala de las manzanas “tipo”, que en este ámbito es la escala de lo doméstico. La edificación correspondiente al Centro de Eventos forma un conjunto continuo, de proporción general horizontal en contraste con las fábricas de las ruinas fragmentadas y verticales, que no excede la altura de las edificaciones colindantes y que construye este fragmento de ciudad inacabada, justamente en una parte en que la ciudad no tuvo forma precisa, en contraste con la forma de la trama ortogonal que regula la ciudad colonial. Pero además, es esencial mantener su condición de vacío ordenado, regular y reconocible, que funcione como una plaza en la que se integran los restos arqueológicos, zonas pavimentadas y vegetación.

Al espacio o recinto acotado se incorporan unos ejes estructuradores de usos y recorridos según las dos direcciones principales, y que también recoge una virtual diagonal que está muy presente en el plano que atraviesa la manzana desde la calle Restauración desde la Plaza de San Antón. Los elementos estructuradores deberán favorecer la permeabilidad de la plaza hacia las calles perimetrales y la ordenación del centro de interpretación y de eventos según la cruz de conexiones principales que se deriva de la traza original del Convento.

Noticias anteriores: INGENNUS es una de las firmas internacionales seleccionadas en la fase final para el diseño de un nuevo complejo cultural y arqueológico en la Ciudad Colonial de Santo Domingo (República Dominicana). 19 de febrero de 2015.