Conjunto residencial de 69 viviendas diseñadas bajo estándares ECCN (Edificios de Consumo Casi Nulo) y certificadas Passivhaus. La composición en planta de cada uno de los tres bloques, así como la ubicación de los núcleos de comunicación, se han llevado a cabo con el mínimo de espacios residuales, actuando los núcleos de comunicación vertical como elementos ordenadores de los espacios. Los tres edificios – de 23 viviendas cada uno – se corresponden con la tipología de vivienda plurifamiliar aislada, con cuatro plantas sobre rasante y una planta sótano destinada a aparcamiento, trasteros e instalaciones.
Los tres bloques de viviendas se han certificado como Passivhaus. El sistema estructural es de losa y pilares de hormigón armado y, la envolvente, de fachada ventilada de piedra. Dentro de las viviendas se ha colocado pavimento laminado en el suelo, baldosa cerámica en los cuartos de baño, falsos techos de yeso pintados y desmontables para colocar máquinas de ventilación mecánica individual con recuperador de calor. También se han instalado radiadores y suelo radiante, a elección de los propietarios, mediante un sistema de producción de calor centralizada con calderas de condensación a gas natural.
Las viviendas se han desarrollado bajo el régimen de cooperativa –modelo muy utilizado en el País Vasco– debido al abaratamiento de costes y la confianza de las entidades financieras. El equipo del proyecto (Gestión Residencial Habitare, LMB e Ingennus) ha sabido exprimir las ventajas del estándar Passivhaus y trasladarlas a un público muy interesado en cuidar del medioambiente, mejorar su calidad de vida y el confort de sus viviendas.
El conjunto está situado en Urduliz (Vizcaya). Desde el año 2020, este se ha convertido en el municipio de España con mayor porcentaje de viviendas Passivhaus por número de habitantes, otorgándole un gran atractivo para los futuros usuarios.
Estado
Año de finalización
Cliente
Constructora
Área
Número de viviendas
Presupuesto
