Singulare es una promoción de 32 viviendas unifamiliares adosadas en Las Palmas de Gran Canaria dispuestas en dos hileras a diferentes alturas de 13 y 19 viviendas cada una. Dada la geometría y topografía de la parcela, estas hileras tienen forma de arco y las viviendas que las componen quedan escalonadas para respetar la topología marcada por una fuerte pendiente transversal en el sentido Sur-Norte, la cual es creciente de Este a Oeste. Todas las viviendas cuentan con dos alturas sobre rasante, y, además, las situadas en la hilera superior también tienen sótano. El acceso al conjunto se produce a través de los dos viales principales: Avenida Juan Carlos I y Calle Doctor Gómez Bosch.
Ambas hileras se orientan hacia el mar, y hacia esa orientación norte se encuentran todas las estancias principales (dormitorios, salones y cocinas), lo que les proporciona ventilación e iluminación directa. Todas las viviendas de Singulare se caracterizan por sus amplios espacios y sus zonas ajardinadas. Con la intención de que las viviendas guarden una relación directa con el espacio exterior, en planta baja se da continuidad al espacio de salón-cocina mediante el jardín, y las terrazas de la primera planta generan espacios de protección a la intemperie y de sombra, lo que facilita la utilización de esos espacios de transición entre exterior e interior. Por su parte, el aparcamiento se encuentra dentro del volumen construido de las viviendas, encontrándose en el sótano en el caso de la hilera superior, y en planta baja en caso de la hilera inferior.
Uno de los objetivos de Singulare consiste en adaptar el conjunto al entorno para aprovechar todo lo posible la topografía existente, compensando los desmontes con los rellenos de cada plataforma de nivelación. Estas plataformas abarcan dos viviendas cada una, y proporcionan homogeneidad al conjunto.
Se aborda la propuesta volumétrica como un ejercicio de integración paisajística. Dado el impacto visual del frente norte de la promoción por su gran exposición y visibilidad desde el exterior, el tratamiento volumétrico del conjunto se basa en la estrategia de “romper” la homogeneidad de ese frente norte con entrantes y salientes, ya que, un frente continuo generaría una masa edificada muy agresiva y poco integrada en el paisaje. Los edificios colindantes y cercanos son de altura similar, garantizando una correcta integración en el entorno, además las fachadas se resuelven conforme a los preceptos de integración estética previstos en la normativa.
Estado
Cliente
Área
Número de viviendas
Colaboradores/as
