Mirador La Florida es una promoción plurifamiliar de 193 viviendas situada en la manzana comprendida entre las calles de Carreño, Bermudo I el Diácono y de Gonzón. El conjunto residencial cuenta con 7 núcleos de comunicación que conectan planta baja, planta primera, 4 plantas tipo y planta ático, así como dos plantas sótano.
En el interior de la parcela existe un parque público de grandes dimensiones al que se accede por dos grandes pasos en la planta calle y planta baja del edificio, lo que, además, ayuda a conectar las calles que lindan tanto con el interior como con el exterior del edificio.
El edificio queda dividido en tres bandas: dos exteriores hacia la calle y hacia el parque, y una intermedia formalizada como un patio y que actúa a modo de eje de ventilación central del edificio. Las estancias principales – los salones-cocina, y en las viviendas no pasantes también los dormitorios – se abren hacia el exterior, mientras que dormitorios y cocinas se abren hacia el patio interior.
Las fachadas exteriores de Mirador La Florida cuentan con terrazas corridas que se formalizan a través de bandejas horizontales blancas a las que se fija un sistema de celosías prefabricadas cuya presencia en fachada se enfatiza mediante el uso de colores oscuros en los fondos de las terrazas. Los vuelos abiertos de las terrazas se combinan con vuelos cerrados localizados en las esquinas de los chaflanes y formalizados mediante curvas. Por su parte, las fachadas interiores son blancas lisas monocromáticas, sobre las que se abren los huecos de las cocinas y dormitorios.
El edificio dispone de calificación energética A-A, para lo que se han implementado medidas como la utilización de secciones de aislamientos que ascienden hasta los 12cm de espesor, así como un tratamiento pormenorizado de los puentes térmicos que pudiesen generarse en las zonas de vuelos de fachada. El resto de la fachada se concibe en sistema SATE (Sistema de Aislamiento Térmico Exterior) que permite igualmente, minimizar la aparición de estos débiles en cuanto a pérdidas energéticas.
Siguiendo en la misma línea del punto anterior, se incorporan carpinterías de PVC de altas prestaciones, con doble vidrio y cámara de gas inerte en su interior, así como pinturas de alta densidad en puntos débiles de la fachada que favorecen la hermeticidad de las viviendas, reduciendo así las pérdidas energéticas por intercambio de aire exterior-interior.
Otra característica inherente a Mirador La Florida es su llamativa fachada ajedrezada, y es que se ha diseñado en base a un módulo prefabricado de celosía a modo de ocultación de vistas. La prefabricación de esta pieza permite estandarizar esta solución, permitiendo el ahorro en obra tanto de costes como tiempos de ejecución.
El edificio esta intrínsecamente relacionado con su entorno más próximo al abrirse las viviendas a las dos fachadas exteriores de las que se compone el volumen, tanto hacia las calles principales como hacia el parque interior de manzana.
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