Por Mónica Tello (Arquitecta Técnica)
¿Por qué la dirección facultativa de una obra es más eficaz cuando la DO (Dirección de Obra) y la DEO (Dirección de Ejecución de Obra) están a cargo de un mismo equipo?
Los equipos multidisciplinares crean mejores trabajos. Si la persona técnica a cargo de la D.E.O está presente desde la confección del proyecto, podrá, sin duda, realizar una dirección de obra mucho más minuciosa que si se incorpora una vez concedida la licencia de obra.
La Dirección facultativa en obras residenciales, obra terciaria y obra civil, la asume normalmente el arquitecto, como D.O, y el arquitecto técnico, como D.E.O. Y esta fusión es imprescindible, pues es de sobras conocido que las tareas que desempeñan son distintas y es totalmente necesaria su coordinación y complementación.
El arquitecto técnico se centra mayoritariamente en los costos, el “control de recepción de materiales y el “control de ejecución”. Cuando el arquitecto técnico forma parte de la elaboración del proyecto puede ofrecer asesoramiento desde el inicio en cuanto a elección de materiales y sus costes. Posteriormente realizará las mediciones, preparará el presupuesto e incluso, en una fase posterior, podrá asesorar al cliente en cuanto a la comparativa de ofertas recibidas por parte de distintas empresas constructoras.
Si el arquitecto técnico ha formado parte del equipo proyectista, conocerá de primera mano qué condicionantes han influido en la toma de decisiones, por qué se ha optado por un sistema constructivo u otro, y sabrá cuales son los gustos y necesidades del cliente. En consecuencia, podrá ofrecer una mejor labor en la obra cuando se planteen nuevas decisiones o modificaciones.
Cuando la persona que ha confeccionado el presupuesto de un proyecto lleva el control de las certificaciones en la obra, es capaz de detectar posibles desviaciones, conoce las debilidades y las fortalezas de la obra, sabe de primera mano qué está ocurriendo en el mercado y en la puesta en obra y tiene la información suficiente para cerrar el ciclo completo de la construcción.
El hecho de formar un mismo equipo permite una comunicación mucho más fluida y que ambos tengan acceso a la información del proyecto y del seguimiento de la obra, así como a ficheros de Revit con reformas y modificaciones, archivos de Presto con certificaciones mensuales, documentación fotográfica, fichas técnicas de materiales, informes de ejecución con detalles de proyecto y de obra, etc.
Aunque, gracias a la tecnología, todo ello debería poder hacerse incluso sin pertenecer a un mismo equipo, de forma separada. Sin embargo, las distintas cargas de trabajo de unos y otros, la necesidad de tomas de decisiones de manera urgente, la utilización de programas de distintas versiones o incluso de diferentes programas, hacen que este trabajo no se desarrolle de la misma manera. ¡Apostemos por los equipos multidisciplinares que faciliten el trabajo y que hagan que este sea de mejor calidad!