Tras el terremoto de magnitud 7,9 que tuvo lugar el pasado 6 de febrero en Pazarcik, distrito de la provincia de Kahramanmaras (Turquía), millones de personas se vieron afectadas por el derrumbe de múltiples edificios. Dada la cercanía de esta zona con la frontera de Siria, el norte de este país también sufrió el impacto del seísmo. Hasta la fecha se han registrado otros dos terremotos de magnitudes 7,6 (también en Kahramanmaras) y 6,4 (en Hatay), y más de 7.200 réplicas, lo que dificulta las tareas de rescate e incrementa la necesidad de recibir toda la ayuda posible de organizaciones, instituciones y otros países.
Las acciones de Cáritas en estas zonas consisten en repartir comida caliente y lotes de alimentos, proporcionar mantas y ropa de abrigo, distribuir paquetes de enseres domésticos y kits higiénicos (pañales, productos de higiene básica), instalar tanques de agua potable, poner en disposición instalaciones para el descanso de los ciudadanos, además de apoyo y acompañamiento a los afectados, y el diseño de un plan de acción de la emergencia.
Ante esta situación, desde Ingennus hemos querido aportar nuestro grano de arena, con una donación de 1.000€, para que todas aquellas personas que se han visto afectadas por los seísmos puedan cubrir, al menos, sus necesidades básicas. Esta acción se vincula directamente con los ODS 1 “Fin de la pobreza”, 2 “Hambre cero” y 6 “Agua limpia y saneamiento”, con los que, desde Ingennus queremos mostrar nuestro compromiso.
En esta línea, la ayuda internacional está siendo extraordinaria, con la participación de diversas unidades de rescate y emergencias de países tanto colindantes como lejanos, además de la colaboración ciudadana que llega desde todos los rincones del mundo.
